leer,  mirar

en todas partes hay señales

Cuando observas un bodegón con detenimiento comprendes que nada ha sido dejado al azar. Cada pieza, cada posición tienen un significado, un código que, en muchos casos, queda oculto por el paso del tiempo.

Algunos son fáciles: un reloj de arena, la fugacidad del tiempo que nos devora, una calavera, la muerte acechando en cada esquina, los relojes sin manecillas que a veces aparecen por aquí, pues justo eso que estáis pensando.

Las frutas parecen seguir otras reglas: las naranjas, la abundancia, la fertilidad. La manzana que nos expulsó del paraíso no puede ser otra cosa que la sensualidad, la lujuria enfrentada desde aquella lejana arcadia al melocotón representante de la virtud.

Las granadas son aún más extrañas, como fruta y como símbolo. Nos hablan de la vida eterna, del futuro que nos espera con una sonrisa. Pero si las posamos en las manos de una virgen nos hablan de la unidad cristiana, la prosperidad en manos de ese ser misterioso que nos dejo un hijo clavado en la cruz como recuerdo.

¿qué puede entonces significar una granada al borde de la podredumbre?

Pintar un bodegón implica observar, anotar durante horas cada detalle hasta que puedas cerrar los ojos y recrearlo en sus más ínfimos detalles. Cuando pones tanta atención en algo siempre le acabas encontrando un significado porque cualquier símbolo puede significar cualquier cosa si pones el empeño suficiente. Y si logras que muchas personas crean en esa cosa entonces has conseguido una verdad inmutable. Algo que nadie se planteará nunca arañar con el dedo para ver si es real.

Pasamos media vida con un código de valores y unas ideas que nunca nos hemos planteado, que nos entregaron como una preciada posesión que debíamos defender con nuestra vida sin hacer preguntas, y la otra media vida intentando prenderles fuego para poder traer algo de luz al camino que recorremos.

Madurar, como en el caso de la fruta, es acercarnos a nuestro final definitivo, pero también es la obligación de romper esas ideas, de empujarlas, lamerlas, arañarlas y golpearlas sin piedad hasta comprobar si hay algo de verdad en ellas.

Cuando el proceso acaba tenemos en nuestras manos un nuevo conjunto de valores e ideas que pasaremos como una preciada posesión a todos los que llegaron después esperando que lo defiendan con sus vidas sin hacer preguntas… y, bueno, ya sabéis como sigue el resto.

A veces creo que no aprendemos nada, sólo corremos por habitaciones en llamas pensando que somos los únicos que sentimos el fuego sobre nuestra piel.

Pero arder, arderemos todos. Esa es la única certeza que nos acompaña.

21 Comments

  • José Luis

    No hay nada peor y más equivocado que hacer que quienes vengan detrás defiendan algo como un axioma. Cada cual que piense y que viva como quiera, pueda o le dejen, porque somos esclavos de las ideas que nos venden los gobiernos y que mucha gente compra sin rechistar.
    En las frutas se aprecia perfectamente el paso del tiempo, buenos medidores de la vida.
    Muy buena tu entrada.
    Saludos.

  • Cabrónidas

    No apredemos nada. Al contrario: creo que desaprendemos y al final todo se reduce a que cada cual intenta ubicarse donde le sea propicio. Buscando nuestra posición de confort con un guión ya escrito en un mundo que nunca fue nuestro.

  • Luz Palabras Desocupadas

    La Granada es tan especial… Desde el Himalaya ha recorrido todo el mundo con granos de rubíes, mística, milenaria. Y con tantos cultos y poderes mágicos a través de las distintas culturas.
    De las fotos, que son como lienzos, has logrado extraer esa magia espectacular.
    Otra de tus genialidades. Y el punto final… Uf.

  • Mucha de la Torre

    si me lees veras que yo no tengo tu problema Soy frontal con la vida y la vida me respeta No hablo de nadie mas que de mi misma aunque mi ego no lo siento Largate salta deja de gemir movete anda trepate a una luz y antes de moriir resucitaras
    besossssssssssssssssssssssss Mucha

  • kasioles

    En más de una ocasión he pensado que voy contracorriente, que debo ser una rebelde porque no me adapto o no me gusta aquello que me imponen y a veces hacen que comulgue con ruedas de molino.
    Cuando te visito, siempre me haces pensar.
    Cariños.
    Kasioles

  • Toro Salvaje

    No he vuelto a comer granadas desde mi infancia.
    Verlas ha despertado recuerdos.
    Hasta la fruta tiene poder evocador…

    He roto con tantas ideas que me parecieron imperecederas… y ya casi no me quedan.
    No tengo fe en nada que se relacione con la humanidad.
    Vivo a caballo de las intuiciones y el instinto.

    Saludos.

  • Beauséant

    A veces creo, JOSÉ LUIS, que también somos un poco culpables de eso. Quiero decir que al final lo más sencillo es eso, aceptar lo que nos han dicho y no preguntarnos muchas cosas porque cuando empiezas con las preguntas, bueno, puede que no te gusten las respuestas. Al final creo que siempre intentamos que todo sea lo más sencillo posible… Y sí, me gusta hacer ese tipo de frutas porque dan lugar a pensar mucho…

    Más o menos ese es el resumen, CABRÓNIDAS, intentamos sentirnos dueños de un traje que hicieron a medida para otras personas y nos pasamos toda la vida intentando entender porque nos tira de todas partes y es tan incómodo.Como dice TEJEDOR PRYTZ, vamos aprendiendo la vida según pasa y, sospecho, al final no aprendemos nada.

    Escribiendo la entrada, LUZ PALABRAS DESOCUPADAS, me dio por mirar cosas sobre la granada y, es verdad lo que dices, tiene algo de mágico. Me hubiese gustado contar algo más sobre ella en el texto, pero me estropeaba el ritmo 😉 Muchas gracias por fijarte en las fotos, eran la excusa para el texto 😉

    Lo que dices, MUCHA DE LA TORRE, parece muy sencillo, pero creo que se puede tardar toda una vida en aprender a hacer algo tan sencillo. Me ha gustado lo de resucitar antes de morir, me parece más interesante que hacerlo después, ¿verdad?

    Me alegra hacerte pensar,KASIOLES, el escribir y las fotos es mi forma de hacerlo… Como le decía a JOSÉ LUIS ahí arriba, no tengo tan claro si nos hacen comulgar o comulgamos con gusto para no tener que pensar. Lo que si he notado es que el paso de los años me hace preguntarme cada vez más cosas sobre todo lo que nos rodea.

    Nunca me gustaron mucho las granadas, TORO SALVAJE, me parece la fruta más complicada que existe, así que me he librado de los recuerdos porque yo soy así también, tengo recuerdos agarrados a casi cualquier cosa… Sigamos viviendo, a caballo de lo que sea, eso es lo más importante, ¿no crees?

  • evavill

    En general dudo bastante de todo, así que no tengo unas creencias muy marcadas ni mucho menos pretendo transmitirlas. Además ya tengo comprobado que raramente me hacen caso.
    La granada tiene que ver con el mito de Perséfone, la raptó Hades y se la llevó con él al submundo. Aceptó a devolverla pero por el camino no podía comer nada, esa era la condición. Comió unas semillas de granada y por eso ha de volver cada invierno a los infiernos. En primavera la deja salir a la superficie, como a las flores y hojas.
    Perdón por el rollazo, me gusta mucho la mitología y también las granadas.
    Y tus fotos, como siempre, magníficas.

  • Mucha de la Torre

    Te cuento como ando entre blogs trabajo en periodicos bloggin lo que hacen los otros me gusta lo que hago y te voy a confesar algo Un buen blogger escribe corto -.Resume en su mente lo que va a escribir – va al grano no anda con vueltas recuerda que ser blogger no es ser escritor. Y tu escribes
    muy bien-
    Pero te sales de las tangentes haciendo que muchos no entiendan lo que quieres trasmitir
    porque no acabas de sentirte seguro con tu sentir
    Un beso se te quiere mucho por aqui

  • Mari Carmen

    El bodegón de las granadas es magnífico, me gusta muchísimo. En cuanto a nuestra manera de enfocar la vida, es cierto que se nos ha transmitido mucho y nosotros, queramos o no, también transmitimos, pero yo espero que, al igual que yo hago, cada uno, en su devenir, resuelva sus asuntos de la manera que mejor le cuadre. Porque nuestra vida es solo nuestra, condicionada en muchos aspectos, pero también podemos elegir, aunque sea un poquitín 🙂
    Me encantan tus escritos, te leo siempre (estás en mi lista de blogs que sigo), aunque a veces no deje comentario. Nos hacen pensar y eso es bueno. Ah, y no me importa la extensión. Supongo que cada uno, en su casa, hace lo que más le conviene.
    Un abrazo 🙂

  • Patricia Plaza

    ¡Qué entrada tan potente! Percibo entre líneas la pesadez de la tradición religiosa en los símbolos heredados. Madurar supone ciertamente arañarlos con el dedo. En ello estamos. Y en dejar arañar los símbolos que creemos que creamos por los que nos suceden.

  • Mucha de la Torre

    Beauséant
    Me encantas como eres y escribes!!!!
    sentido sensible
    sin saber quien eres
    nunca me habia pasado
    ya que no sé si eres hombre o mujer
    Te siento hombre….
    Gracias
    por tu aporte
    emocional

  • whatgoesaround

    Hola.
    La curiosidad me ha traído hasta tu blog. Juraría que jamás había entrado, o ahora no recuerdo. Buenas entradas, leí también la de los obreros y la virgen que se aparece bajo unos tablones. Vaya con el cura avaricioso…
    Por partes…
    Si el bodegón es la primera foto, granada entera y otra partida por la mitad, es precioso. Probablemente sea como dices, el pintor piense hasta en los más mínimos detalles de su obra. Después siempre surge el debate de las intenciones primigenias del artista y por otro lado las que puedan adjudicar o suponer los espectadores.
    La foto de la granada medio podrida me parece repulsiva. Espero no fuera ese el bodegón…😀 Es que la verdad, le veo una textura casi de carne humana. Parece una especie de corazón o riñón extraídos, me parece un poco asqueroso. Influirán los tonos de color en esa semejanza e impresión. Esto me ha recordado que hace mucho tiempo, no recuerdo (creo que fue en el contexto de alguna obra literaria) se hablaba de gente que comía frutas a medio camino de la putrefacción, como signo de distinción y clase. Me pareció a su vez algo asqueroso (puede que a alguien le guste), delirante, decadente.
    Resulta que la granada es una de las frutas que más beneficios tienen para el organismo. Lo sé porque desde hace unos meses decidí cuidarme un poco más a nivel de alimentación e investigué un poquito. El poder antioxidante de las granadas supera en mucho al de los arándanos. Además parece que tienen efectos beneficiosos en relación con aparato urinario, próstata, etc. Curioso. Hay un nutricionista que las ponía en su top five. Otra fruta con propiedades tremendas es el pomelo. Resultado, que ahora como ambas cosas con relativa frecuencia. Sobre todo pomelos, aunque son algo amargos. Y la granada (o magrana) es complicada de comer, sí. Le corto toda la piel con un cuchillo y ataco con los dientes. Con cuchara es un poco aparatoso…
    Y toda tu argumentación sobre los valores sociales… algo “panfletaria” 😀, lo cual no quita para que esté muy de acuerdo con lo dicho. Todos/as deberíamos poner en tela de juicio todos los valores, premisas, doctrinas, ideas, normas… y buscar lo razonablemente verdadero, útil, ético, etc. No aceptar o tomar todo lo que nos inculcan sin rechistar ni planteárnoslo, diciendo amén como mansos corderitos. Obviamente hay todo tipo de gente. También los que se dejan lavar el cerebro o tragan para medrar o no buscarse problemas. Muchas de las ideas o valores que pretenden inculcarnos suelen tener que ver con el establishment, con los círculos de poder (gobiernos, empresarios, iglesia… ) porque buscan justificar los aspectos inaceptables para así perpetuar sus privilegios, posesiones, poder, status, etc. Lo que se suele entender por “las derechas”. De ahí que se les llame con razón “conservadores” (a todos los niveles, el ideológico y el material). Las izquierdas pueden tener valores igual de corrosivos y peligrosos, claro. Véase el comunismo. En fin, que uno debe dudar de todo y sin duda luchar por cosas que trasciendan los valores materiales, el dinero, la posición, etc.
    Ciao.

  • tonYerik

    Por lo general he ido siempre a contracorriente. En mi trabajo me decían que iba por libre. Y era uno de esos trabajos en los que normalmente te asignan una tarea y tira con ella (sector financiero) Me he tirado cuarenta y dos años haciendo lo que me daba la gana y ahora ya jubilata perdido miro atrás y no me explico como no pusieron de patitas en la calle. Bueno creo que una vez venían con el cheque. Pero terminaron por ascenderme. Nunca me gustó, me imagino que por eso.
    En mi vida voy por el mismo camino y ya no voy a cambiar. Mientras me dejen respirar mis acompañantes la cosa irá. Si no, me voy.
    Me gusta esa granada que parece medio pocha, pero ocurre que luego la abres, tan ajadita ella, y te encuentras que los rubíes interiores están tan lozanos y eso me encanta.
    No se debe dar nada por sentado sin antes abrirlo y mirar dentro.
    Me encanta esa fruta ( y no precisamente para comerla). Sera porque me recuerda a mi admirado Dalí.

    Por cierto, hace mucho que no pinto bodegones pero cuando lo hice, al igual que con cualquier otro cuadro nunca pensé antes de ponerme en que iba a ver el espectador cuando lo mirara. Es como el peso de la pintura, No hace falta calibrar el cuadro al final siempre sale el peso justo y cuando lo miras no te chirria porque nunca se va a caer más de un lado que del otro. Eso sale automáticamente.

    Salud

  • Krudo

    Pfff tiempo, que complicado es eso, es como las señales, como la vida misma, no voy a mentirte y me fijé si alguna grabada del árbol ya estaba madura pero no, sabes creo siempre te lo escribo, me haces reflexionar y vaya que no es fácil, cuando le pongo tanta atención a los detalles de algo muchas veces se me olvida lo más importante, eso que no se ve con detenimiento, eso que te da la primera impresión, eso que siempre está ahí, me disperso demasiado pero bueno, ¿qué es el madurar?, en las frutas lo entiendo, estoy esperando a que maduren un poco las qué tengo.

    Te dejo un abrazo sin detalles, claro, real como ningún otro.

  • Beauséant

    La gente que duda, EVAVILL, en general me cae mejor que los que nunca dudas, los que trazan una línea recta y la siguen hasta el final. No sé si leerás esto, pero me encantaría ver una historia de las tuyas contando lo de la granada, las fotos ya las tienes, si las quieres 😉

    Gracias, MUCHA DE LA TORRE, por la crítica, siempre he considerado este sitio como un lugar de dispersión, pero en algo si tienes razón, conviene escribir claro e intentar transmitir las ideas de la mejor manera posible, lo no sentirme a gusto no lo tengo tan claro… Sin embargo, tu comentario, me choca respecto al otro que has escrito, no sé si era un sarcasmo o es lo que lo has mirado con otros ojos… En fin, que no entiendo nada 🙂

    Muchas gracias, MARI CARMEN, opino parecido, el escribir este texto ha sido un poco por eso mismo, porque quiero recordarme que podemos elegir, quizás no mucho, quizás estemos más condicionados de lo que nos pensamos, pero siempre tenemos un pequeño margen en el que nos podemos mover y que podemos intentar ir haciendo más grande. Gracias por pasarte, es un placer leer tus reflexiones.

    Pesadez es un buen resumen, PATRICIA PLAZA, nunca he sido una persona en exceso rebelde, pero no me gustan las cosas que son “porqué sí”… No caí al escribirlo, pero al leerte me he acordado Nietzsche, que proponía hacer filosofía a martillazos para ir derribando los viejos mitos (creo que dijo algo así, lo digo de memoria)

    Pues me alegro por tu curiosidad, WHATGOESAROUND, yo también he pensado si algunos de esos símbolos eran reales, si de verdad el autor pensaba en ello al pintarlo o si es algo que hemos ido añadiendo después.
    Y, reconozco, que la segunda foto ha sido hecha un poco con esa idea, la de ser algo un poco repulsivo, jugué con la luz y el color para lograrlo, pero sólo hice la foto, en ningún momento pensé en ingerirlas 🙂 creo que la gente que tiene mucho dinero acaba con la cabeza un poco desnortada buscando “sensaciones”.. tampoco me gustan mucho las granadas, bueno, sí me gustan, pero es muy complicado poder pelarlas, me pasa como a ti 🙂
    Y, de nuevo, sí, me ha quedado un texto un poco panfletario, antes escribía muchos textos de eso, los años me han ido ablandando y casi no me meto en ciertos jardines, pero hay cosas que aún sigo revindicando, que creo que no debemos dejar de pelearlas. Es verdad que hay una línea complicada en eso de no aceptar lo que nos dicen, ¿verdad? Al final te salen antivacunas o terraplanistas que creen que son especiales precisamente porque se rebelan contra lo establecido… Digamos que lo primero es informarse con honestidad y luego sacar conclusiones, por desgracia algunos lo hacen al revés.
    Es un tema complicado, la verdad, muchas gracias por tu reflexión, me ayuda conocer otros puntos de vista para eso, para no dejar de aprender, para no esconderme dentro del caparazón y negar el mundo real.

    Muy buena metáfora lo de la granada pocha que al abrirla tiene rubíes en su interior, TONYERIK. Es verdad, las cosas siempre deben intentar abrirse para ver lo que contienen. Yo intento aplicar ese concepto a todo lo que puedo, en mi trabajo, bueno, es más complicado, pero creo que también me van conociendo ya y hay ciertas cosas en las que me dejan a mi aire.
    Gracias también por compartir tu experiencia de pintor, no esperaba encontrar algo así en los comentarios. Quizás en la pintura clásica jugaban con otros códigos, ¿no? Ya sabes el cliente te pide que pongas una manzana, pues tampoco vas a discutir más, ¿no? manzana al canto.

    Lo he dicho muchas veces, KRUDO, pero el escribir me sirve para eso mismo, para reflexionar y, con los comentarios, siempre encuentro muchas, muchas cosas, los leo y los mastico, a veces se quedan días y días dando vueltas, a veces se convierten en otro texto… y así va pasando la vida, supongo que en algún momento habremos madurado, o al menos caído del árbol… no lo sé, la vida pasa, eso esta claro.. y no nos avisa… me gustan los abrazos reales, gracias.

  • Ángeles

    Me ha encantado tu reflexión sobre los símbolos, y en particular la idea de cómo ciertos códigos y valores van pasando de generación en generación sin que los cuestionemos. Esto me ha hecho pensar, no sé muy bien por qué, en el relato de Kafka, “Josefina la cantora o el pueblo de los ratones”.

    Es lo bueno de los blogs personales, como éste, que puedes escribir sobre lo que te interesa y lo que sientes, y como sientes y como te apetece, sin tener que ajustarte a ninguna delimitación editorial ni nada por el estilo. Y los que te leemos podemos dejarnos llevar también libremente por lo que nos sugieren tus textos.

    Saludos!

  • Gabiliante

    Creo que tienes razon en que observar tanto las cosas, como para pintarlas, te concede permiso para atribuirles atrbutos y simbologias poco objetivos e infinitamente subjetivos. Si consigues transmitirlos al observador, me parece casi un milagro. Creo que gustan porque son bonitos, y transmiten belleza y bienestar.
    El corcho de las granadas esta horriblrmente malo.
    Vi una peli sobre la belleza de la podredumbre. Creo que era “zoo”, de un tal peter greenaway, que solo hizo unas cuantas pelis; lo menciono porque era un cine curioso y preciosista(creo que él era pintor), y creo que te gustaria a ti que fografías.
    Puedes creerte los axiomas sl principio, y crearte un criterio propio antes de empezar a morirte. Una etapa intermedia de lucidez. Y no ser un pesado intentando transmitir tus descubrimientos a los demas. Cada uno que haga su trabajo.
    Esto ha sido un poco largo, lo siento.
    Saludoss

  • Beauséant

    Me gustan las referencias que sacas de estas entradas, ÁNGELES, no conozco la que mencionas, así que me la apunto para más adelante. No he leído mucho sobre Kafka, pero me gusta…
    Sobre el sitio, pues eso que dices, que para dar una imagen de lo que no somos o forzar lo que publicamos, ya tenemos instagram, ¿no? En algunos textos, como este, son más largos los comentarios que la entrada y eso me encanta, la verdad.

    Dije pintar, GABILIANTE, porque es lo obvio, pero incluso pasa algo parecido con la fotografía, cambias la luz, el punto de enfoque y, poco a poco, vas pensando cosas y, como dices, intentas transmitirlos lo mejor que sabes. Y, al igual que he dicho antes, tomo nota de la referencia 😉
    Una breve etapa de lucidez justo en el medio, sí, creo que en eso se resume la vida… por suerte la chapa la doy aquí y así no voy siendo demasiado cargante en persona.

    Gracias a todos por vuestros comentarios y por la extensión, de verdad que me alegra mucho leer vuestras reflexiones, me alegran el día

    Un abrazo.

  • laacantha

    …pensando que somos los únicos que sentimos el fuego sobre nuestra piel… Es verdad, ardemos todos y es lo que, me tranquiliza mucho. Me tranquiliza al descubrir que no soy la única idiota con mis equvocaciones , pasiones , busquedas y pérdidas. Somos muchos, entonces es como debe de ser, Es preciosa tu entrada.

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