última noche en la ciudad
La última noche en la ciudad los teléfonos no dejaban de comunicar y no habÃa nadie en ninguna parte, las calles estaban vacÃas, los coches parados. Todos escondidos, esperando algo que no acababa de llegar.
Y todo era extraño porque la noche anterior habÃa soñado contigo y me decÃas que todo saldrÃa bien justo antes de despertar.
La última noche en la ciudad la pasé en un hotel lleno de grifos que goteaban y cañerÃas que se desperezaban en medio de la noche con un ruido infernal. Yo estaba en medio de una cama enorme tapándome la cabeza con las sábanas y fingÃa que ya nada podrÃa asustarme.
Hubo un incendio en alguna parte, eso lo recuerdo, con gente gritando y miles de luces de colores rompiendo la oscuridad. Desde mi ventana vi un edifico en llamas y pensé que eso debÃa ser una señal de algo cuya existencia desconocÃa pero que era muy importante.
Si hubieses estado aquà sé que me lo habrÃas explicado, como siempre hacÃas. Pero para entonces eras poco más que un recuerdo.
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5 Comments
virgi
Nada como la compania deseada psra ayudarnos a entender la vida.
Bssss
Beauseant
A veces, virgi incluso la no deseada nos puede servir, aunque tan sólo sea para saber donde no queremos estar…
Brisa
Tal vez escuchar de nuevo los sueños, dejar que se fundan los recuerdos en las ausencias y como dices saber donde estamos, incluso a través de donde no deseamos estar, igual que sucede con la compañÃa….
Eres como un transmisor de emociones.
Me ha gustado mucho, mucho y mucho ¡¡
Un abrazo desde la ciudad.
Tristancio
… y de paso, la última noche en la Tierra.
Beauseant
A veces, Tristancio, estamos siempre de paso…