leer,  mirar

mar y rocas

El mar golpea una y otra vez, una y otra vez a la roca que se yergue necia y orgullosa sobre la arena.

La roca mira con desprecio hacia el agua que viene y va, que viene y va sin descanso. Se siente invencible, no tiene forma de saber que ya ha perdido, que en el momento en que la primera ola chocó sobre la base su destino quedó sellado.

La roca no tiene memoria, no sabe que donde ella mora solitaria hubo, hace eones, otras muchas rocas que juntas formaban un muro que cerraba el paso al océano. Cayeron una tras otra, todas igual de necias y orgullosas ante el empuje de esa eternidad sin nombre que es el mar.

Un golpe tras otro, sin posibilidad de escapar, fiándolo todo al orgullo de resistir un día más.

A eso se reduce todo, a resistir, a sacar la cabeza y tomar una bocanada de aire justo antes de volver a ahogarte. Casi sin entenderlo, casi sin asimilarlo porque a ese continuo ahogarse de mierda lo has llamado vida y ya no lo concibes de otra manera.

22 Comments

  • Jo

    Recordé mirando estás magnificas imágenes a un pintor que aquí en México se hacía llamar dr. Atl.
    obviamente con sus justas diferencias…
    uno se cree invencible, quizá a veces hasta tengas que fingir ser hasta valiente, pero sin embargo cada experiencia, cada roce, cada arañazo o encontronazo nos va transformando.

  • Toro Salvaje

    Ola tras ola la vida nos va erosionando.
    La vida no se cansa.
    Nosotros sí, y además no somos rocas.
    Somos especialmente vulnerables ante el paso del tiempo y las decepciones de todo tipo que vamos acumulando.
    Siempre he pensado que el mar es la patria de todos los humanos.
    Quizás las olas de la vida vienen a buscarnos para volver a ser agua y nada.

  • Ángeles

    Así es, la persistencia de las gotas de agua puede erosionar la piedra más dura. Eso, como todo, podemos verlo desde dos puntos de vista, como nuestra resistencia frente a los embates de la vida, o como la implacable fuerza que acaba con nosotros por más que nos resistamos. Según tengamos el día de positivo o de negativo 😉

    Me ha gustado cómo has imitado con el lenguaje el ir y venir de las olas, y las fotos me encantan, parecen un paisaje extraterrestre.

    También me ha gustado la última frase dle comentario de Toro Salvaje.

    Saludos!

  • evavill

    También puede ser que la roca sí lo sepa pero no puede escapar de los embates del mar. Se limita a estar, a ser, y puede que hasta lo disfrute a veces, ¡es tan bello su destructor!
    Menudas fotos preciosas, la luz y el color son una maravilla.

  • Beauséant

    Qué imágenes tan chulas, JO, si supiese pintar así no lo intentaría con la fotografía 🙂 Creo que sí, que al principio te crees inmortal, cuando descubres lo falsa que es esa inmortalidad es cuando empiezas a fingiarla. Cualquier cosa antes que reconocer lo aterrador que te resulta todo, ¿verdad?

    La vida nos cansa, TORO SALVAJE, así es, cada vez tienes menos ganas de darte golpes contra las mismas puertas que ya sabes cerradas. Volver a ser agua y nada, me gusta eso para una canción o el título de un libro.

    Esa es otra, CABRÓNIDAS, la cantidad de batallas que creemos un deber el lucharlas, honor, patria, qué se yo.

    Sí, ÁNGELES, TORO ha puesto un buen título, habría quedado bien 🙂 Las fotos, sí, forcé un poco los tonos para darle ese toque, quedaba un poco forzado, pero es lo que buscaba.
    No lo había visto desde el otro punto de vista, lo mismo el mar no tiene la culpa de las rocas que encuentra en su camino, ¿no? Será verdad que al final no hay culpables ni inocentes?

    Muchas gracias, EVAVILL, es la tercera opción, ¿no? que al final nadie sea ni deje de ser, que simplemente existan sin más presupuestos ni intenciones.

    Esa es buena también, LUZ, muchas gracias 🙂

  • Krudo

    Muchas veces somos esas rocas otras tantas somos las olas qué nos arrastran, creo que hay una cosa y es que siempre sabemos de donde venimos pero pocas veces a donde vamos, la marea nos lleva a lugares insospechados.

    Te dejo un abrazo reflexionando a las 7 menos diez de la mañana.

  • Mucha de la Torre

    El mar me gusta vivo cerca me gusta su aroma a salitre lo tibio que siempre es desde la mañana
    la paz que le manda a mi cuerpo
    caminar a su orilla hace bien al alma

  • whatgoesaround

    El texto es casi perfecto y los símiles apuntados ingeniosos. Y digo “casi” porque en cierta forma lo fastidias con el “ahogándose en mierda”. ¿Por qué “en mierda”? Es la vida, es la realidad, es el todo. No creo que la roca piense “en mierda”, sino que quien la ahoga es el mar, es agua. ¿Por qué esa negatividad, ese pesimismo, ese derrotismo, esa visión cargada de decepción y dolor?
    Ten en cuenta que a cada embate la roca se convierte en mar, a nivel molecular. Así que ya son uno y van fusionándose poco a poco. De hecho el mar contiene toneladas incontables de rocas, de granos de arena y sedimentos sólidos. ¿Qué es lo que ocurre? Que la pobrecita mente racional lo simplifica todo a través de palabras, símbolos, ideas, poniendo límites mentales (con la palabra) que son absolutamente imaginarios. La roca ya es mar (y su agonía y muerte lentísimas) y el mar ya es roca. La Unidad ya es, en todo momento. Esto es lo mismo que la manzana, el bistec, el tomate, el agua, el aire ya son parte de tu cuerpo paulatina e incansablemente. ¿Dónde están los límites, dónde está el sujeto? Solo en tu mente, en tu cabecita.
    Hay una filosofía oriental, o quizá varias (puede ser el taoísmo) que ya apunta que el agua es más poderosa y resistente que la piedra, de la misma forma que el junco flexible es más resistente que la espada rígida. Muy sabio.
    En cuanto a esas decepciones que decís (Toro) que nos van desgastando, ¿no crees que si hay decepciones es porque hay demasiadas expectativas puestas, demasiada exigencia y después demasiada queja? Hay que encontrar la sabiduría y la serenidad de aceptar las cosas tal y como suceden, sin interpretarlas demasiado, intelectualmente..
    Hay una fábula en mi blog que se titula “El campesino chino y su hijo”, y que versa sobre todo esto. La desgracia y la buena fortuna, lo bueno y lo malo, ya que hemos hablado estos días de la relatividad de estos conceptos.
    Ciao.

  • Anonymous

    Pero el símil con la vida que nos erosiona y con las personas es magnífico, así como las fotos.
    Whatgoesaround.

  • Beauséant

    Ni tan siquiera tengo claro, KRUDO, que tengamos claro de dónde venimos. Cuando miro hacia atrás veo un pasado difuso, no tengo claros los puntos de anclaje que me sujetan… Tampoco sé si eso es malo, a las siete de la mañana las cosas se ven diferentes, ¿verdad?

    El mar es terapéutico, MUCHA DE LA TORRE, nos da mucho y no pide nada Tienes suerte de tenerlo tan cerca…

    Muchas gracias, WHATGOESAROUND, me resulta tentador darte la razón. La roca, como deberíamos hacer los humanos, acepta lo que viene sin hacerse muchas preguntas, sin pensar si eso es algo bueno o malo, si lo ha buscado o simplemente ha llegado… y, claro, al final la roca formará parte de un algo mayor y cíclico, se convertirá en aquello que la ha destruido lo cual, no lo había pensado, pero es algo muy bonito.

    El problema es que yo no soy una roca y no acepto con resignación las cosas. demasiadas expectativas puestas, demasiada exigencia y después demasiada queja, dices, y tienes toda la razón, el mundo es como es y no hacemos más que intentar encagarlo en nuestras expectativas. Parecemos unos niños no muy inteligentes intentando montar un puzzle y cuando las piezas no nos encajan nos liamos a puñetazos con el tablero para hacerlas encajar. Es sabio aceptar las cosas, es sabia la resignación, pero creo que la resignación puede llevar al inmovilismo, a un conformismo que, como he escrito muchas veces, es una forma desagradable de morir. Sé que mi forma de ver el mundo no me traerá la felicidad, sé que pasaré mucho tiempo peleando contra cosas y causas con las que ya he perdido sin haber presentado batalla, pero…. no puedo dejar de hacerlo.

    Creo que leí esa fábula, era el campesino que vienen a buscar a su hijo para el ejército, ¿verdad? Es una historia profunda y con una gran enseñanza, pero al final deja todo en manos del azar, ¿es esa una buena enseñanza?, confía en el azar y acepta lo que venga… pues no lo sé, la verdad 🙂

    Muchas gracias por un comentario tan profundo y por expresar con libertad tu opinión. A veces es más fácil no hacerlo por si acaso no se toma bien, no es mi caso.

  • whatgoesaround

    “Al final la roca formará parte de un algo mayor y cíclico, se convertirá en aquello que la ha destruido lo cual, no lo había pensado, pero es algo muy bonito”. Esta reflexión tuya es a su vez preciosa y me ha gustado muchísimo.
    Todo esto que comentas/comentamos debería matizarse mucho, porque creo que existen finísimas líneas que separan unas actitudes de otras, y muchas veces todo va mezclado. A ver si me explico mínimamente. Creo que esa aceptación de las cosas, la vida, los eventos, los hechos, es efectivamente sabia. Podemos llamarle serenidad, ecuanimidad si no dejamos que nos afecte en absoluto (tanto en sentido positivo como negativo, esto es importante). Y claro, esto en cierto sentido es estar ya muerto, como apuntas, porque como dicen los del sendero espiritual (siempre estoy con esto, lo sé, pero es que es nuestro norte, quieras creerlo o no) se trata de la muerte del ego (su disolución, desaparición). Si no te afecta en absoluto que te toque la millonada en la loto (más allá de serena alegría) pero tampoco que tu hermano muera en un accidente entonces es como si estuvieras muerto a nivel de reacciones, pasiones, etc. Esa serenidad global e ir profundizando en ella me parece muy bien y muy sabio.
    Por otro lado es perfectamente lógico, lícito y positivo procurar siempre nuestro bien, mejorar, ser más felices, tener ambiciones y proyectos, sueños e intentar llevarlos a cabo. Toda esa serie de cosas, buscar la felicidad, la plenitud, mejorar, sentirnos bien con un trabajo (qué suerte) o nuestra actividad favorita. Creo que el secreto está en la actitud y en cómo nos lo tomamos, y ahí ya tenemos una de esas delgadas líneas. Si todas esas cosas logran desestabilizarnos en cualquier sentido, y sobre todo si provocan emociones negativas porque las cosas no nos salen bien (frustración, cabreo, bloqueo, inseguridad, obsesión… lo que sea) entonces ya tenemos un problema. Si un sueño o proyecto no acaba de salirnos bien simplemente hay que seguir intentándolo y luchando con constancia, fe, serenidad. Y ojo que digo esto cuando yo hace unos años, no tanto, estaba bastante amargado y frustrado en líneas generales. Quejándome de la vida, por decirlo corto. Actitud negativa, un no “recto pensar”. Me di cuenta de que así no iba a ninguna parte, tan solo a aumentar la frustración, la amargura, la rabia. Que tenia que cambiar el chip, que era absurdo escupir hacia el cielo, como dice la expresión. Y empecé a cambiar, porque en el fondo de mi ser, aparte de potencial oscuridad (falta o ausencia de luz) también hay mucha Luz, y que hacia ahí quería encaminarme. Solo después de cierto tiempo puedo hablar con más serenidad de eso, de la serenidad y ecuanimidad, de no tomarte las cosas excesivamente a pecho. Mejor no sé explicarlo. Repito, tener sueños, ilusiones, proyectos, etc. es muy bonito, lógico, humano… se empieza a torcer la cosa cuando no salen según lo previsto y empiezan el cabreo, la frustración, los pensamientos negativos que cada vez van calando más y te crees más, porque influyen. Esa es la dinámica decepciones-antes expectativas-después frustraciones a la que antes aludía. Hay una delgada línea en según qué actitud adoptemos ante todo esto, ante la vida.
    Date cuenta, deberías haberlo hecho ya a estas alturas, que todos mis comentarios y planteamientos giran bastante en torno a ese dominio del mundo interior, de las emociones o pensamientos. Sí, es hacer limpieza o purificarse.
    Otra cosa: a mí no me convencen ni de hecho me gustan las palabras y conceptos de resignación y conformismo. Son diferentes de esa aceptación serena, y ahí tenemos otra delgada línea que diferencia actitudes. A veces sí, no queda más remedio que resignarse ante cosas que parecen no tener arreglo o posibilidad de salir bien. Tampoco todo esto, volviendo a lo de antes, ha de significar inmovilismo, como dices. Es cuestión de seguir intentando. Aunque el inmovilismo no ha de ser siempre malo. Ten en cuenta que la cosa más difícil para un ser humano es no hacer absoluta, absolutamente nada. Y eso implica no pensar, no sentir, no juzgar, evaluar, desear… es un no moverse interior, que de hecho es la sabiduría del sabio, del iluminado, del Buda y semejantes. Creo que es lo ideal. También piensa que en definitiva el azar nos golpea siempre, lo aceptemos o no, lo veamos o no. Otra delgada línea que separa actitudes es que inmovilismo, serenidad, resignación, etc. no implican forzosamente no hacer nada y tragar con todo lo que viene o sucede (supongo que a eso te referías). Somos parte de la realidad, un trocito de ella, e influimos y la modificamos, así que estamos metidos en esa cadena, de nuevo, de causas y efectos. Si escribes un libro dejas una huella, causas efectos. Si comentas algo o haces una reflexión puede que influyas en alguien, que le hagas pensar y por tanto cambiar en algún sentido. Si bombardeas un país causas efectos, cambias el mundo. Así que tenemos la posibilidad de actuar, pese a que exista el azar y la realidad sea tozuda. O en otras palabras, resignación y aceptación no significan conformismo en el sentido inmovilista y fatalista del término. No sé, espero haberme explicado sobre esas delgadas líneas que hacen variar las actitudes. Esto no es fácil de ver, necesita maduración. Todo esto encuentro que está muy relacionado con el llamado Camino Medio del budismo. El Buda entendió que para llegar a la sabiduría no eran buenos los extremos, como mortificarse como un asceta o dejarse arrastrar por todas las pasiones. Lo mismo que meditar o iluminarse no significa dejar de pensar, sino aceptar los pensamientos con naturalidad, es decir, como otros eventos que surgen en la mente (pero no hay “yo” que los produzca). Todos estos matices se asemejan a lo de buscar la felicidad vital. De hecho anoche pensé y me acordé de esa gran novela, El filo de la navaja (también sobre la búsqueda espiritual, quién eres). Se denomina así porque lograr entender cuáles son los métodos más útiles (para la felicidad, sabiduría… ) es tan difícil como caminar sobre el filo de una navaja.
    Así que la roca se deja golpear, desgastar, destruir por el mar y el humano lo mismo con la vida, sin compadecerse o caer en todas esas negatividades de “qué desgraciado soy” o “qué mal me trata la vida”. Cuando piensas eso ya la has cagado, rompes el equilibrio y caes en el lado oscuro. De nuevo es saber vivir con ese recto pensar, sin juzgar. Y sí, de eso va la fábula del campesino chino. No juzga como buena suerte o desgracias… su hijo trae un caballo salvaje, que después le parte la pierna, y después viene el ejército reclutando hombres y el hijo se salva. ¿Qué es bueno o malo entonces? Necesitamos también la perspectiva que nos da el tiempo…

  • Anonymous

    Releo mi maratoniano comentario (realmente no tengo remedio 😂😂😂) y…
    1.Esa aceptación serena de las cosas, de los acontecimientos y la vida en general no significa esa resignación o conformismo en un sentido fatalista de “no puedo hacer nada” o “no debo hacer nada” o “no merece la pena hacer nada” o “es imposible por más que haga”, etc. Eso es ser fatalista, pesimista y derrotista. Nunca hay que perder de vista que tenemos un margen de acción, de maniobra para actuar, para influir, cambiar las cosas, la realidad, por poco que sea.
    2. Lo de la fábula del campesino no creo que sea exactamente “confía en el azar (deja todo en sus manos) y acepta lo que venga”. No es exactamente eso. Para mí es “acepta lo que venga (lo que sea, desgracia o fortuna) y sin dejarte influir demasiado (sobre todo frustrarte, hundirte, cabrearte, desestabilizarte, rendirte) nunca olvides que tienes un margen de acción para cambiar las cosas, por poco que sea. Pero no pierdas la serenidad, aunque las cosas te afecten aprende a recuperarla cuantas veces sea necesario. Acepta las cosas pero… mente y corazón en calma, pero manos a la obra… eso es, básicamente. El matiz diferenciador es importante.
    Whatgoesaround.

  • mag

    Las imágenes son maravillosas, con esa luz, esos tonos… Y las palabras que son remanso de vida y de lucha.
    Somos roca unas veces. Otras, simplemente agua. Resistiendo, manteniéndonos. Adaptándonos, moldeándonos…

    Un beso enorme 😚

  • laacantha

    Hablando de la vida solemos usar las palabras como resistir, luchar, sobrevivir , sufrir etc. Pero a mi me gustaría añadir …colaborar y amar. Creo que tengo la cuarta opción : la roca se entrega al mar amándolo , le deja generosamente disfrutar de su cuerpo y su belleza. La roca igual disfruta de esa consumación porque ama. ¿ Que te parece? Un abrazo.

  • Beauséant

    He tardado en contestar, WHATGOESAROUND, porque he necesitado leerte dos veces 🙂 Me ha gustado esa comparación entre resignación / conformismo y la aceptación serena. En mi interior entiendo el concepto, incluso diría que lo aplico en bastantes casos de mi día a día. Creo que es un poco lo que decía un antiguo compañero mio, que lo resumía todo con eso de shit happens. O, en esa gran novela que es matadero número 5 con el so it goes, cuando las cosas simplemente pasaban. La vida, como dices, a veces te golpea, a veces te acaricia, y en realidad no puedes rebelarte constantemente contra eso porque acaba siendo una frustración constante, pero tampoco puedes dejarte llevar por la corriente cuando simplemente con un par de brazadas podrías salvarte.
    Al final todo esto se reduce un poco a buscar el punto medio, ver que batallas se pueden plantear y ver aquellas en las que simplemente no ganarás nada… sospecho que es un camino complicado, se necesita toda una vida para aprenderlo 😉

    Muchas gracias, UNA_VIDA_MUNDANA, son de esas fotos que al hacerlas ya te imaginas cómo quieres que queden y lo que quieres escribir sobre ellas. No es algo que ocurra a menudo, al menos a mi no me ocurre a menudo.

    A eso se reduce todo, MAG, Resistiendo, manteniéndonos. Adaptándonos, moldeándonos.. y, como comentaba por ahí arriba, también cabreándonos un poco, que de vez en cuando hace falta y, claro, añade LAACANTHA, colaborar y amar.. Tienes razón, LAACANTHA, lo había planteado un poco como una batalla, una lucha entre dos elementos y quizás haya algo de colaboración, de aceptación, de conversión en otra cosa…

    Siempre aprendo mucho con los comentarios, 😉 Muchas gracias a todos

  • Anonymous

    En tu comentario vienes a sintetizar y coincidir con todo lo que he esbozado en mi inhumana y despiadada parrafada😀.
    Sí, me parecen válidas las expresiones “shit happens” y “so it goes”. Efectivamente y como dije la vida, los acontecimientos sencillamente se desenvuelven y ocurren. Las cosas pasan, no es que exclusivamente te pasen “a ti”, que también. ¿Cuando hay un terremoto o una pandemia te pasa solo a ti? No. ¿Cuando envejeces o enfermas o tienes mala suerte te pasa solo a ti? No. Hay un bloguero que siempre dice respecto a estas cosas que no debemos tomarnos nada de lo que sucede demasiado personalmente.
    Si te dejas llevar por la corriente porque quieres alcanzar la integración con la realidad, no reaccionar desde el ego o los apegos/rechazos, y buscar la serenidad-sabiduría, bien, perfecto. Es aceptación serena. Si lo haces a regañadientes o con conformismo mal, es resignación pasiva y fatalista. Tú mismo/a dices que podemos dar dos brazadas. Yo hablo de que tenemos un margen de maniobra.
    Tú dices que se trata de encontrar el punto medio. Yo hablé de ese Camino Medio propuesto por Buda.
    Tú hablas de encontrar ese equilibrio, yo hablo de caminar sobre el filo de una navaja.
    Tú dices que es un camino complicado que necesita muchos años de aprendizaje. Yo he dicho que esas delgadas líneas que diferencian actitudes son muy sutiles y que requieren de maduración. Como ves, coincidencia en alto grado. Me alegro. Bienvenido sea todo alejamiento de actitudes y pensamientos negativos. No ayudan, al contrario.
    Whatgoesaround.

  • Beauséant

    Sí, la parte de ir desterrando los pensamientos negativos y el todo me pasa a mi la tengo ya casi controlada 🙂 otra cosa es que de vez en cuando me ponga un poco en plan performance, pero sólo es por desahogarme un poco, no me hagas caso.

    Muchas gracias por tus reflexiones

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