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agua y nada

El mar de la anterior entrada un poco más enfadado… no, no el mismo mar, ya nos explicó el griego aquel que el mar de entonces nada tiene que ver con el mar que ahora moja mis pies. Es el mismo mar, pero ha cambiado, yo he cambiado.

Por eso no podemos volver a los lugares donde creímos ser felices, los lugares ya no son los mismos, las personas son diferentes. Cada ola, cada golpe recibido, nos moldea, nos convierte en otra cosa, me gustaría pensar que mejor, pero eso es algo que me cuesta creer.

Quizás, como dijo Toro en un comentario, esas olas de la vida vienen a buscarnos para volver a ser agua y nada.

17 Comments

  • Toro Salvaje

    Y aún así intentamos volver buscando aquello que un día fuimos y claro… eso es un engaño de la mente… yo vuelvo y vuelvo al barrio de mi infancia… es un imán emocional que no deja de llamarme.
    Encuentro las calles, las casas, los árboles (más grandes) y un vacío de lo que viví que hiela el alma.
    Agua y nada.
    Eso.

    Saludos.

  • Cabrónidas

    Yo creo que en el fondo no cambiamos. Incluso podemos aparentar lo que no somos de puertas para afuera, y tampoco. Cambian nuestras prioridades, y en base a ellas vamos en una dirección o en otra, siendo siempre los mismos.

  • beauseant

    Continuamos, sí, JOSÉ A. GARCÍA, aunque nos sepamos muy bien dónde y el guía parezca haberse vuelto loco. Supongo que ya es tarde para hacerse las grandes preguntas…

    La duda, TORO SALVAJE, si ese vacío es real o es algo que surge al comparar la realidad con la idea que tenemos de esa realidad. A veces las cosas sólo parecen mejores porque las queremos imaginar mejores. En nuestros recuerdos todo parece más bonito, ¿no?

    Nunca lo he tenido claro, CABRÓNIDAS, algo me dice que tienes razón, que en el fondo no cambiamos, al menos no cambiamos de manera radical, pero esos cambios que comentas en nuestras prioridades, ¿no acaban por cambiar lo que somos? Pequeños grados en el rumbo te llevan de descubrir América a terminar comido por los salvajes en Australia 🙂

  • evavill

    Es cierto que todo va modificándose y nosotros también. Eso es la vida. Y al final la nada. Aunque esa frase de no poder volver al lugar donde fuiste feliz no me gusta del todo. Tiene su verdad pero, ¿y si podemos ser felices en ese mismo lugar otra vez o de otra manera?
    Eso también puede ocurrir.
    Geniales las fotos de olas en blanco y negro.

  • Alfred Comerma Prat

    Es así, nada de lo que se reencuentra, coincide con lo que fue, ni nosotros, ni la compañía sí la hubo, ni los elementos puestos por la naturaleza. Es el mismo lugar pero con tantos cambios que es imposible repetir la misma experienca, por más interés nostálgico que queramos ponerle.
    Me encanta la foto de ese mar que ya es diferente.

    Un saludo.

  • laacantha

    Además ,al no encontrar lo que esperabamos en los lugares de nuestra felicidad , corremos riesgo perder el maravillo recuerdo de los tiempos felices. A lo mejor intacto, en la memoria.
    Desde luego, las olas de la vida nos moldean tanto con golpes fuertes como con suaves caricias y no siempre para bien, es verdad. Un abrazo.

  • Krudo

    En esencia somos tan diferentes qué no importa el pasar del tiempo seguimos siendo los mismos… Me has ayudado en descifrar eso de no volver a los lugares donde uno fue feliz, pero creo que es uns apuesta, puede ser mejor o puede ser peor… Lo mismo que pasa con un lugar nuevo, por ejemplo tenía casi 3 meses de no tomar coca cola, le di un trago hace unos días y me supo horrible, espero que ahora no solo sean 3 meses si no mucho tiempo más, quizás así puede ser con los lugares donde fuiste feliz, puede ser que cuando vuelvas pueda ser horrible o mucho mejor.

    Te dejo un abrazo siendo el mismo pero diferente.

  • Mucha de la Torre

    La mente nos maneja Yo no me doy cuerda con mi pasado donde fui amada y feliz
    No se gana nada
    He tomado cursos de Reiki que me han ayudado a ser lo que hoy soy
    Felzi en el momento que vivo
    Ni pa tras
    ni pa’lenta. se disfruta de las pequeñas cosas
    un chocolate
    un beso
    un orgasmo
    una comida
    y quizas nada mas que eso.
    Pero todo es lindo y positivo
    Un abrazo inmenso para vos que cada dia escribís mas lindo

  • Beauséant

    Ser felices en el mismo lugar de otra manera, EVAVILL, suena bien, suena a frase que me gustaría creer, pero me cuesta, no quiero, pero me cuesta. No sé, esos lugares parecen contaminados por el recuerdo, ¿no? No les veo dando una segunda oportunidad a nadie.

    Gracias, ALFRED COMERMA PRAT, y sí, un pequeño cambio, una sutil inclinación y las cosas son totalmente diferentes, yo también lo creo.

    Esa es otra cuestión interesante, MANUELADLERT, los recuerdos deformados. No sólo las cosas cambian, es que la forma en que recordamos también lo hace, lo hemos distorsionado para adaptarlo a lo que esperamos encontrar, para no hacernos daño…

    Eso me pasa con las películas, LAACANTHA, me pongo ahora las película que hace años me entusiasmaron y ahora me resultan huecas, sin sentido. Tienes razón, es mejor guardar el recuerdo en una vitrina y verlo siempre desde lejos….

    Y eso que comentas, KRUDO, ha sido en tres meses, imagina tres años, imagina diez… Como dices es una apuesta, pero es una apuesta en la creo que ya salimos con los números perdedores en la mano. Mi cobardía natural me impide comprobarlo, pero si te animas ya nos contarás cómo te ha ido 😉

    Gracias, MUCHA DE LA TORRE, me gusta mucho esa imagen de dar cuerda al pasado, es muy potente. Hay que buscar esos pequeños momentos, sí, dejar de escarbar en el basurero del pasado… Muchas gracias.

  • Gabiliante

    El mar se enfada, pero tampoco consigue nada. Ya no estan los mismos pies ni las mismas huellas que borrar. Y es el Mar…imagina nodotras que somos unas mierdecillas comparados con él (o ella). Y no poder volver nos da rabia aunque fuera subjetiva aquella felicidad. ¿Por que la rabia? Porque no duró? Porque lo mejor de aquello es el recuerdo?
    Al finsl bajamos los brazos, porque la realidad y el tiempo siempre vencen.
    A alguien no le da rabia?
    Saludos

  • Nuria Lourdes Ruesta Zapata

    Hola, artista del alambre!
    Muy bonito y reflexivo post el que nos compartes. Yo creo que mar es como el amor… Nunca deja de ser.
    Te dejo un fuerte abrazo y gracias por tu cálida visita a mi casita bloguera.

  • Manuela Fernández

    Ya lo decía aquel filósofo griego: “Nunca te puedes bañar dos veces en el mismo río”. La vida cambia cada segundo y nosotros con ella -afortunadamente-
    SAludos.

  • Beauséant

    la realidad y el tiempo nos vencen, GABILIANTE, así es. Da igual lo que corramos, lo que hagamos o lo que peleemos, el tiempo y la realidad nos vencen, siempre.. Rabia, sí, much rabia y tristeza… pero, ¿qué remedio?

    Buena comparación, NURIA LOURDES RUESTA ZAPATA, la apunto 😉

    En el fondo creo que sí, que afortunadamente, si nos quedásemos atrapados siempre en lo que somos… bueno, no estaríamos contentos tampoco, ¿verdad? Quizás nunca estemos contentos.

    A veces pensamos que los golpes recibidos nos hacen más fuertes, KASIOLES, pero yo tampoco lo tengo claro, supongo que es algo que preferimos creer, que aprendemos algo con los tropiezos…

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