¿Es posible que esta mezcla de tiempos se produzca porque Dios está rebobinando la película? Nos encontramos en el incierto recuerdo de un Dios que ha empezado a olvidar. A perder la memoria de lo que dijo en el principio. En un mundo hecho de nombres, olvidarlos constituye su fin natural. Dios no ha muerto. Dios ha olvidado. Dios sufre demencia.
A veces, cuando veo estas imágenes tan tremebundas de la imaginería religiosa me pregunto cómo alguien puede sentir fervor religioso frente a algo tan terrorífico. No me digas que la cara del Cristo no asusta, la de la Virgen y ¿ San Juan? parecen totalmente espantados. No sé si fue tu intención, pero a esta fotografía le has impreso un toque totalmente entre tenebroso e inquietante, así como de asustar, pero mucho … vamos, q al Cristo solo le falta despegar ( parece que ni está clavado, como q flota y q va a mutar a un ser dantesco jajaja Como se acerque algún alma devota aquí, me va a dar jaja pido perdón : ) Y sí, yo también pienso que ese párrafo tiene toda la razón, tal cual va todo creo que sufre demencia senil, no sé que va a ser de nosotros ; ) Un beso.. y por favor, ten piedad, ya asusta bastante la realidad sin tu ayuda.. un respiro 🙏🏼😉
Buena definición, JOIEL, a los dos lados, la humanidad ha enloquecido…
Me ocurre algo parecido, MARÍA, los dioses griegos eran divertidos, unos hijos de puta de cuidad, pero muy humanos en su forma de pensar. Al final se trataba de comer, fornicar y pasarlo bien… no entiendo cómo dimos el salto a una religión tan necrófaga, la verdad. Tanto exaltar el dolor, la muerte, el sufrimiento, es como estar con un adolescente emo… La intención de la foto era esa, justo al hacerla, moví la cámara hacia arriba, quería figuras fantasmales, un puñado de locos alucinados bailando en la hoguera donde arde el mundo… ya sabes 😉
La imagen de la demencia me pareció muy acertada, en el fondo es una explicación perfectamente lógica, ¿verdad?
Has conseguido que me intrigue la novela de Gospodínov, ya la he cargado en mi ebook 🙂
En cuanto a Dios, yo lo tengo claro. No es que sea viejo y con la mente deteriorada, sino que se dedicó a descansar el séptimo día después de la creación, pensando que ya todo estaba hecho, y claro, el hombre lo ha superado por todas partes, se ha quedado defasado. Ahora, una vez despierto después de su siesta de millones de años, anda dando gorrazos a diestra y siniestra (sobre todo a siniestra) para ver si recupera el poder, pero le va a ser imposible. Que no se hubiera quedado dormido.
Bueno, delante del tremendismo es lo que parece, pero tenemos libre albedrío. El ser humano pasa por altos y bajos, y esta vez estamos en un momento grave, pero saldremos, ya lo verás.
Cuidate.
Salut
Irme de este mundo sin haber comprendido nada es muy desalentador.
Las teorías cambian, las religiones se oxidan, la ciencia avanza y se contradice… y mientras tanto nadie ha descubierto ni el origen ni el destino de este universo y de los que lo habitamos.
Yo solo puedo decirte que, siglos atrás, las gentes eran muy ignorantes, no sabían leer y los escultores tenían la obligación de que sus imágenes expresasen dolor, amenaza, miedo, terror, piedad, amor.
Lo cierto es que esa imagen de Cristo no está nada lograda, se presta a comentarios de todo tipo.
Cariños.
kasioles
Dejo el horno puesto, Diego, y sus criaturas han tomado sus propias decisiones y han ignorado sus sagradas órdenes, ¿verdad? Bien podría ser, sí. La novela me gustó mucho, tiene un planteamiento interesante aunque raro, y es capaz de presentarla muy bien. Espero que te guste 😉
Saldremos, Miquel Cartisano, los que salgan, en cada curva del camino siempre hay alguien que no lo logra… Supongo que lo tenemos, el libre albedrío, no lo he pensado mucho, pero prefiero creerlo.
Y si, Toro Salvaje, la respuesta es esa, que no hay respuesta. Que tras lo que parece un vacío aterrador hay eso, un vacío aterrador. Si tras el azar y el absurdo lo que hay es absurdo y azar.
Lo mismo ha sido una campaña de marketing, Cabrónidas, necesitaban un mártir y lo fingieron todo, ¿te imaginas?
Sospecho, kasioles, que como en toda forma de expresión hay varias escuelas. Una escuela busca imágenes más bellas, buscan el lado digamos optimista, la salvación, la resurrección etc, y otra quiere adoctrinar a través de las amenazas, del dolor del infierno, del purgatorio. Sospecho que el cristo de la foto pertenece a la segunda corriente aunque, para mi, si está logrado, otra cosa es que no me guste el mensaje, claro
He pausado “Las tempestalidas”, no sé si seguiré con su lectura. Con Dios tengo mucho cuidado no vaya a ser que exista y se vengue de mis palabras. Con ese tiempo pasado de iglesias oscuras con curas apocalípticos, sacristías con sacristanes de sotana prestada, beatas dormidas en sus reclinatorios, confesionarios como consultas de psiquiatras de liquidación, monaguillos que aspiraban a comer y un etcétera que ahora no me da la vida para ampliar, me ha ocurrido como al dios de Gospodínov, me he olvidado (no del todo, guardo rencores que acaricio hasta que se conviertan en odio). En el fondo olvidar, meter la nostalgia en un frasco, entre los de arroz, azúcar y pimentón de la Vera es imprescindible para pasar por lo menos este viernes, después ya veremos. (Me acaba de morder el recuerdo de una tal Marie ¿ves?)
No descarto nada, Conejo, quizás sea una peligrosa mezcla de locura, enfado y hastío….
Muchas gracias, Citu, un abrazo
Es un libro que hay que tomar con calma, Pedro M Martínez, sin discutir con él, simplemente leerlo y ver dónde te quiere llevar. Creo que lo leí en un buen momento, lo mismo en otra ocasión lo habría desterrado la verdad.
Siempre me ha fascinado lo que rodea a la iglesia, todo ese ambiente que genera y que has descrito tan bien. Ese tiempo detenido, apolillado, ese fin del mundo que nunca termina de llegar… Es mejor el olvido, sin duda, hagamos como ese Dios cansado y olvidemos, pero hazte un favor, olvida también el odio, ¿de qué sirve llevar el balance de los agravios?, ponlo junto al arroz y el pimenton o, mejor, hazlo junto a esas especias que nunca usas y así no tendrás que verlos cada vez que hagas un guiso. Ese condimento picante que compraste en un mercadillo y que sabe horrible, pues ahí, detrás de todo eso… La Marie era un poco así, ¿no te acuerdas?, prometía muchas cosas, pero luego no era tampoco gran cosa…
Transmite unensake tranquilizador a los creyentes. Se genufletan ante él, y no pueden por menos que pensar: ” Si este es Dios ( más o menos) y mira como está, yo estoy mejor que quiero. Me falta mucho para llegar a esfera tan mal. Voy a echar sl cepillo, a ver si reúnen para poner otro parecido”.
Abrazooo
15 Comments
Joiel
Locura a ambos lados del espejo. Amén a tales palabras, amen.
María
A veces, cuando veo estas imágenes tan tremebundas de la imaginería religiosa me pregunto cómo alguien puede sentir fervor religioso frente a algo tan terrorífico. No me digas que la cara del Cristo no asusta, la de la Virgen y ¿ San Juan? parecen totalmente espantados. No sé si fue tu intención, pero a esta fotografía le has impreso un toque totalmente entre tenebroso e inquietante, así como de asustar, pero mucho … vamos, q al Cristo solo le falta despegar ( parece que ni está clavado, como q flota y q va a mutar a un ser dantesco jajaja Como se acerque algún alma devota aquí, me va a dar jaja pido perdón : ) Y sí, yo también pienso que ese párrafo tiene toda la razón, tal cual va todo creo que sufre demencia senil, no sé que va a ser de nosotros ; ) Un beso.. y por favor, ten piedad, ya asusta bastante la realidad sin tu ayuda.. un respiro 🙏🏼😉
beauseant
Buena definición, JOIEL, a los dos lados, la humanidad ha enloquecido…
Me ocurre algo parecido, MARÍA, los dioses griegos eran divertidos, unos hijos de puta de cuidad, pero muy humanos en su forma de pensar. Al final se trataba de comer, fornicar y pasarlo bien… no entiendo cómo dimos el salto a una religión tan necrófaga, la verdad. Tanto exaltar el dolor, la muerte, el sufrimiento, es como estar con un adolescente emo… La intención de la foto era esa, justo al hacerla, moví la cámara hacia arriba, quería figuras fantasmales, un puñado de locos alucinados bailando en la hoguera donde arde el mundo… ya sabes 😉
La imagen de la demencia me pareció muy acertada, en el fondo es una explicación perfectamente lógica, ¿verdad?
Un abrazo
Diego
Has conseguido que me intrigue la novela de Gospodínov, ya la he cargado en mi ebook 🙂
En cuanto a Dios, yo lo tengo claro. No es que sea viejo y con la mente deteriorada, sino que se dedicó a descansar el séptimo día después de la creación, pensando que ya todo estaba hecho, y claro, el hombre lo ha superado por todas partes, se ha quedado defasado. Ahora, una vez despierto después de su siesta de millones de años, anda dando gorrazos a diestra y siniestra (sobre todo a siniestra) para ver si recupera el poder, pero le va a ser imposible. Que no se hubiera quedado dormido.
Miquel Cartisano
Bueno, delante del tremendismo es lo que parece, pero tenemos libre albedrío. El ser humano pasa por altos y bajos, y esta vez estamos en un momento grave, pero saldremos, ya lo verás.
Cuidate.
Salut
Toro Salvaje
Irme de este mundo sin haber comprendido nada es muy desalentador.
Las teorías cambian, las religiones se oxidan, la ciencia avanza y se contradice… y mientras tanto nadie ha descubierto ni el origen ni el destino de este universo y de los que lo habitamos.
Saludos.
Cabrónidas
Ese hombre crucificado alucinaría bastante si levantara la cabeza y viera el aborrecible tinglado secular que hay montado entorno a su imagen
kasioles
Yo solo puedo decirte que, siglos atrás, las gentes eran muy ignorantes, no sabían leer y los escultores tenían la obligación de que sus imágenes expresasen dolor, amenaza, miedo, terror, piedad, amor.
Lo cierto es que esa imagen de Cristo no está nada lograda, se presta a comentarios de todo tipo.
Cariños.
kasioles
Beauséant
Dejo el horno puesto, Diego, y sus criaturas han tomado sus propias decisiones y han ignorado sus sagradas órdenes, ¿verdad? Bien podría ser, sí. La novela me gustó mucho, tiene un planteamiento interesante aunque raro, y es capaz de presentarla muy bien. Espero que te guste 😉
Saldremos, Miquel Cartisano, los que salgan, en cada curva del camino siempre hay alguien que no lo logra… Supongo que lo tenemos, el libre albedrío, no lo he pensado mucho, pero prefiero creerlo.
Y si, Toro Salvaje, la respuesta es esa, que no hay respuesta. Que tras lo que parece un vacío aterrador hay eso, un vacío aterrador. Si tras el azar y el absurdo lo que hay es absurdo y azar.
Lo mismo ha sido una campaña de marketing, Cabrónidas, necesitaban un mártir y lo fingieron todo, ¿te imaginas?
Sospecho, kasioles, que como en toda forma de expresión hay varias escuelas. Una escuela busca imágenes más bellas, buscan el lado digamos optimista, la salvación, la resurrección etc, y otra quiere adoctrinar a través de las amenazas, del dolor del infierno, del purgatorio. Sospecho que el cristo de la foto pertenece a la segunda corriente aunque, para mi, si está logrado, otra cosa es que no me guste el mensaje, claro
Un abrazo.
ConejoOdiaGuordpres
O tal vez está loco y quiere volver a vernos sufrir como en los tiempos pasados.
Citu
Te hace pensar, te mando un beso
Pedro M Martínez
He pausado “Las tempestalidas”, no sé si seguiré con su lectura. Con Dios tengo mucho cuidado no vaya a ser que exista y se vengue de mis palabras. Con ese tiempo pasado de iglesias oscuras con curas apocalípticos, sacristías con sacristanes de sotana prestada, beatas dormidas en sus reclinatorios, confesionarios como consultas de psiquiatras de liquidación, monaguillos que aspiraban a comer y un etcétera que ahora no me da la vida para ampliar, me ha ocurrido como al dios de Gospodínov, me he olvidado (no del todo, guardo rencores que acaricio hasta que se conviertan en odio). En el fondo olvidar, meter la nostalgia en un frasco, entre los de arroz, azúcar y pimentón de la Vera es imprescindible para pasar por lo menos este viernes, después ya veremos. (Me acaba de morder el recuerdo de una tal Marie ¿ves?)
Beauséant
No descarto nada, Conejo, quizás sea una peligrosa mezcla de locura, enfado y hastío….
Muchas gracias, Citu, un abrazo
Es un libro que hay que tomar con calma, Pedro M Martínez, sin discutir con él, simplemente leerlo y ver dónde te quiere llevar. Creo que lo leí en un buen momento, lo mismo en otra ocasión lo habría desterrado la verdad.
Siempre me ha fascinado lo que rodea a la iglesia, todo ese ambiente que genera y que has descrito tan bien. Ese tiempo detenido, apolillado, ese fin del mundo que nunca termina de llegar… Es mejor el olvido, sin duda, hagamos como ese Dios cansado y olvidemos, pero hazte un favor, olvida también el odio, ¿de qué sirve llevar el balance de los agravios?, ponlo junto al arroz y el pimenton o, mejor, hazlo junto a esas especias que nunca usas y así no tendrás que verlos cada vez que hagas un guiso. Ese condimento picante que compraste en un mercadillo y que sabe horrible, pues ahí, detrás de todo eso… La Marie era un poco así, ¿no te acuerdas?, prometía muchas cosas, pero luego no era tampoco gran cosa…
Milena
Pufff esa imagen es terrible… incluso más tremenda aún que lo que por el mundo nos cuentan que acontece…
Gabi C S
Transmite unensake tranquilizador a los creyentes. Se genufletan ante él, y no pueden por menos que pensar: ” Si este es Dios ( más o menos) y mira como está, yo estoy mejor que quiero. Me falta mucho para llegar a esfera tan mal. Voy a echar sl cepillo, a ver si reúnen para poner otro parecido”.
Abrazooo