leer,  mirar

palimpsesto

El invierno ha dejado tres hojas a los pies de mi casa. Estaban tan perfectametne colocadas, en fila y de mayor a menor tamaño, que he llegado a pensar con ingenuidad si habría sido una broma de mis nuevos vecinos. Pero la calle estaba vacía como una premonición cuando he salido a comprobarlo.

Las he sostenido a contraluz por el peciolo para mirarlas por el haz y el enves y me han devuelto una pequeña costelación de manchas y nervaduras que casi parecían palpitar llenas de clorofila. Un mapa sin territorio, unos caminos sin destino definido, delgados como las líneas de la vida. He pensado en un palimpsesto escrito en un idioma que aún no me esta permitido conocer.

La vecina que vive en la puerta de enfrente y que tiene hechuras de adivina me recomendó nada más conocerme que creyese en cuanta señal me saliese al paso. Y esas hojas, ¿qué otra cosa podrían ser?

Las he recogido con cuidado y he decidido guardarlas y fotografiarlas a la espera de saber interpretarlas. Un entomologo de señales astrales, clasificar, anotar, esperar la revelación y volver a empezar.

Una de esas hojas tenía el tono ocre y gastado del cuero viejo, otra tenía un pequeño corazón de color verde casi desvanecido y la última, la última es un misterio para mi. Tiene una parte central de un color verde que parece ir expulsando al color rojo hasta el exterior. Pero quizás sea al revés, lo desconozco todo sobre los árboles, puede ser el verde el que retroceda cediendo el territorio hasta desaparecer.

Tengo una sensación parecida al contemplar las estrellas en el firmamento. Una negrura inmensa a punto de devorar los pocos puntos de luz que aún resisten, o pequeñas luces que han aparecido donde antes no había nada y que acabarán por derrotar a la oscuridad.

La eterna lucha del bien contra el mal, de las dudas contra las certezas. De unas vidas en las que es imposible saber si estamos a punto de firmar la rendición definitiva, o si sólo estamos tomando fuerzas para afrontar la remontada final.

Las hojas lo saben, el problema es que no hemos aprendido a leerlas.

32 Comments

  • Beauséant

    Eso es lo primero que me llamó la atención, JOSÉ A. GARCÍA, que estaba secas, pero aún parecían tener mucha vida, estaban brillantes y con muchos colores.

    Muchas gracias, MANUELA FERNÁNDEZ, me encantaría darte las gracias en twitter, pero no tengo ni idea de cómo funciona 🙁 Acabé haciendo esta página porque era lo único que sabía controlar (más o menos), pero muchas, muchas gracias.

    Me encantan las hojas de los árboles en otoño e invierno, CARMEN, son siempre una buena excusa para hacer fotos. Muchas gracias por tus palabras.

    Te puedes acercar, o las puedes alejar, TORO SALVAJE y siempre parecen contarte algo diferente, ¿verdad?

  • Luz

    Qué decirte… Cuánta belleza has transmitido con las hojas posando para ti, abriendo su belleza y su misterio. Pero para qué más palabra si lo has expresado todo.

  • Cabrónidas

    Quizá los antiguos sí sabían leerlas. Se dice, y algo he leído al respecto, que la naturaleza está llena de códigos. Aunque si es así, mejor que singan sin ser descifrados; a saber lo que haríamos con ellos.

  • Ángeles

    Las hojas son maravillosas, irreales, pura fantasía. Y tu texto las acompaña con algo de magia también.

    No hay que saberlo todo, no hay que poder descifrarlo todo. Es bueno que siempre quede duda, intriga, misterio. Quizá, y disculpa la incoherencia, ese sea el mensaje de las hojas: que no todo está al alcance de nuestro conocimiento, que no podemos descifrar todos los códigos. Y está bien que sea así.

    Saludos.

  • José Luis

    Un texto sencillamente precioso, delicado,con magia, que transmite belleza,pleno de pensamientos y palabras que juegan con esas bonitas hojas, con sus colores que se esfuerzan en ser otoñales al ir perdiendo la savia, desde fuera hacia adentro.
    Me ha encantado, cuánta sensibilidad!
    Besos.

  • Mucha de la Torre

    no importa aprender o no
    cada uno sabe donde le aprieta el zapato
    No tienes que contarlo lo guardas para ti y tu armario
    un abrazo inmenso

  • Anonymous

    A veces, cuando el tiempo se acuerda de mí y me da una tregua, me paso a leerte… y es bueno. (Soy Tristancio)

  • evavill

    Un texto precioso y unas bellísimas fotografías.
    Me gustan mucho las hojas, en todos sus momentos vitales.
    A lo mejor la señal es un mensaje del árbol que te dice que hagas como él y sueltes lo que ya no te es necesario.
    Firmado: la bruja Maruja 😉

  • Beauséant

    Gracias, LUZ, me alegra que e haya gustado, para mi era muy especial también 😉

    Pienso lo mismo de las dos cosas, CABRÓNIDAS, que la naturaleza tiene una reglas que no hemos llegado a comprender y que, visto lo visto, casi que mejor así.

    Es algo que me gusta mucho de la fotografía, ÁNGELES, que cuando te acercas mucho las cosas cambian por completo, tienen otros significados, el cambio de escala las convierte en otra cosa.. Y, al igual que el comentario anterior estoy de acuerdo, me has recordado a esa escena de matrix en la que te explican que el truco del mago que dobla la cuchara es que, en realidad, no hay ninguna cuchara. Lo mismo nos empeñamos en montar un rompecabezas que no es tal.

    Muchas gracias, JOSÉ LUIS, en la vida real tengo que poner otra cara para que no me coman, así que cuando aparezco por aquí es para intentar ser otra cosa diferente, así que gracias, es bueno sentir un empujoncito de vez en cuando.

    Eso es verdad MUCHA DE LA TORRE, a mi me educaron para poner el aprendizaje como el norte de todos los mapas y, bueno, la edad nos va haciendo ver las cosas de otra forma aunque, ahora que lo pienso, eso también es aprendizaje 🙂 Un abrazo.

    Jopé, TRISTANCIO, que alegría verte por aquí de nuevo… recuerdo que este sitio empezó contigo, me da mucha pena toda esa gente que estaba y que los años han ido dejando.. Muchas gracias por el comentario, me ha dado mucha alegría.

    Gran idea, EVAVILL, soltar lastre, buscar otros horizontes…. para los árboles parece sencillo, pero cualquier sabe, como decía en el texto, lo desconozco todo sobre los árboles.

    Sé que es un comentario de spam, RAINBOW EVENING, pero ha quedado tan poliglota el comentario en inglés que creo que lo dejaré ahí 🙂

  • kasioles

    Mira, siente, escucha con atención, hasta las viejas piedras de los edificios de las grandes ciudades tienen algo que decirnos ¿Cómo no van a hacerlo esas hojas recién caídas de un árbol que languidece al compás de la estación?
    No cabe duda alguna de que escribes con pasión.
    Cariños.
    Kasioles

  • Frodo

    Hay belleza en esas fotos, en las hojas en sí, pero también en tu texto.
    Tal vez sí, haya algo que interpretar y no sabemos, tal vez sólo nos quieren contar del paso del tiempo y la Belleza.

    Abrazos

  • Beauséant

    Gracias, KASIOLES, en algunos temas más que en otros, supongo que como todo el mundo 😉 tenemos que aprender a escuchar, a interpretar y, sobre todo, a dejar de creernos tan importantes, ¿verdad?

    Gracias, LANOCHEMASLARGADEMEDIANOCHE, aún no lo he aprendido, pero estoy en ello

    Quizás sea eso FRODO, creo que lo dijeron en otro comentario, quizás el mensaje es que no hay mensaje, que sólo eran unas hojas bonitas que se cruzaron en mi camino. Aún así me alegro de haberlas fotografiado… muchas gracias 🙂

  • Krudo

    Te voy a ser muy sincero, ultimamente trabajando en una huerta de mangos me di cuenta de que desconocía tanto de la naturaleza demasiado, bien lo dices esos colores y yo creo que es lo mismo en todo lo que nos rodea, pareciera que estamos tan extasiados en tener un celular de gama alta, un auto muy bueno, vaya un sin fin de cosas que se nos olvida la naturaleza, ahora me gusta extraviarme en el cerro o 2 horas en la noche con el telescopio.

    Te dejo un abrazo de esos que te ayudan a seguir conociendo.

  • mag

    Los ocres del otoño tienen la vida de todos los colores del infinito. Tus letras son como los frontales y espaldares de tus hojas, y las emociones que plasmas, como la caricia del viento.
    Ciertamente, disfruto mucho estos textos que contienen filosofía y poesía.
    Un beso enorme.

  • Beauséant

    Un telescopio, KRUDO, siempre ha sido una de esas cosas que tengo en mente.. creo que vivo en medio de demasiadas luces para poder ver nada, pero no dejo de soñar con la posibilidad 😉 Gracias por el abrazo, lo guardo con las hojas.

    Creo que han quedado más bonitas tus palabras, MAG, que las mías. Me gusta lo de espaldares, es una palabra muy llena de vida, ¿no? Siempre se me dio muy mal la filosofía, aunque dudo de si aquello que nos dieron (repetir nombres y fechas) era en realidad filosofía o su historia.. en cualquier caso, muchas gracias

  • whatgoesaround

    Hola. Muy buena entrada, precioso el texto así como las hojas, que son maravillosas con sus formas y colores. Es ni más ni menos que el milagro de la vida. Están tan llenas de belleza y de misterio…
    Mi punto de vista: no me cabe la más mínima duda de que las cosas, per se, no tienen ningún significado, mensaje o interpretación, mal que le pese a tu vecina la adivina. Todas esas cosas se las adjudican a posteriori los seres humanos. Es la conceptualidad, el pensamiento, el intelecto, el lenguaje (que funciona con símbolos). Llámale como quieras. Mi punto de vista, altamente budista-espiritualista-místico-trascendente (supongo queda claro) tiene muy claro que es el ser humano el que añade capas y capas mentales (o conceptuales) a la realidad, al universo, a la experiencia. Y claro, a partir de ahí tenemos tantas interpretaciones y posibles mensajes como queramos. Ah, y la palabra palimpsesto es también preciosa.

  • Beauséant

    He leído este comentario tras otro en el que te preguntabas si existía de verdad el yo y me parece que están conectados, ¿verdad? empiezas por pensar en todas esas capas que hemos ido poniendo y te acabas por plantear si de verdad existe algo debajo, si de verdad existimos.
    En mi caso intento ir a lo práctico, cuando desconozco algo y no tengo forma de saber la verdad, busco la opción que me permita seguir viviendo sin muchos quebrantos. Es una opción un poco cobarde, pero funciona 😉

    Creo que pasa lo mismo con las interpretaciones, en el fondo sabemos que muchas son mentira, pero nos ayudan a seguir así que no son tan malas. Por eso no tengo problemas, a priori, con ninguna religion. Mis problemas vienen cuando imponen una vision única de las cosas.

  • whatgoesaround

    Gracias por contestarme. Voy revisando en las entradas que más o menos recuerdo haber comentado. Ya te dije que no veo forma de recordar cuáles son, si no es que me las apunte… le comentabas a alguien que tu blog tenía un feed. Aunque lo siguiera no creo solucionara este punto para nada. En relación a esto, he pensado hace un rato (es una sugerencia, solo): ¿y si incorporaras una columna, como tienen muchos blogs, donde se recogen los comentarios más recientes? Sería una forma de darle feedback a los que leen y comentan, y además al margen del último/s artículo publicado, que a priori podría ser el más visitado o comentado. Bueno, lo veo una forma de “ayudar” a los que dejen comentarios, ¿no crees? Es solo una idea.
    Ya que estoy con cuestiones técnicas, tu simpático blog me obliga a rellenar el dichoso cuestionario CADA VEZ que comento. Ostras. Ya sé que soy un pesado. ¿Como administrador no puedes mirar si se puede hacer algún ajuste? En WP por ejemplo recuerdo una opción “hacer que un visitante nuevo se identifique la primera vez que comenta”, con lo cual después ya queda fichado y se le reconoce. ¿Podrías mirarlo, please? Me huele a plataforma WP tu blog.
    Sí, este comentario sobre las capas mentales y la conceptualidad va muy en relación sobre la pregunta de la existencia o no del yo. Existencia real, fáctica, quiero decir. El yo o ego es una configuración psicológica, mental, funcional. Me parece claro. Pero para mí es una imagen, una idea, un espejismo, una capa mental más, precisamente. Bueno, todos lo sentimos así por abstracto que pueda sonar. Todos sentimos que estamos interpretando y ajustándonos a un “personaje” que tiene unos diálogos consigo mismo, etc. No hay tal personaje. Solo la mente funcionando. ¿Ves el punto? A la ausencia de ser intrínseco del yo el budismo le llama anatta, y en general referido a todo objeto o ser, sunyata. Pues mira, acabas de acercarte mucho con esto: “empiezas por pensar en todas esas capas que hemos ido poniendo y te acabas por plantear si de verdad existe algo debajo, si de verdad existimos”. Exacto, es la intuición de que debajo realmente no hay nada. Todo está vacío, la vacuidad (sunyata).
    Así que sí, el ser humano maneja interpretaciones a diestro y siniestro. Claro, interpreta el mundo y necesita del lenguaje y el pensamiento. No quiero comerte el coco, ni mucho menos convencer, y lo digo porque tengo la sensación de que muchas personas pensarán que eso pretendo. Y por lo que has dicho; que una religión pretenda imponer su visión única. Al hilo de esto, aunque el budismo derivó en parte en una religión institucionalizada, para mí no lo es, sino en esencia una filosofía. Y ésa es la parte que de verdad me interesa y me sirve. Ya que estoy en ello, decir que religión y espiritualidad para nada son lo mismo. Es una distinción importante.
    Gracias por “escucharme”.

  • Beauséant

    No conozco nada del budismo, así que he apuntado los términos que has mencionado porque me parecen muy interesantes. Es una religión de la que he escuchado muchas cosas y de la que no conozco nada. Por lo que comentas parece muy práctica, una forma de afrontar el día a día sin grandes preguntas. Sin grandes preguntas y sin imponer.

    Me ha hecho gracia lo del personaje porque yo vivo siempre en tercera persona. No sabría explicarlo, pero siempre me veo desde fuera, como si tuviese un narrador en la cabeza…y si, claro, todos somos un poco personajes. En el trabajo, la familia, no sé, nos compartamos de manera diferente. No creo que eso sea ser falso, todos esas partes forman un yo real. Sería falso si nada de eso fuese real… vaya que es un lío…

    Es un placer contestarte, se aprenden cosas nuevas y se reflexiona sobre las viejas. Así que gracias.

    Lo que comentas del sitio, ando un poco a ciegas. He probado con otro navegador y si me recuerda, te refieres a la casilla de recordar nombre y email, verdad?, o entras con una cuenta de WordPress. Siento mucho el lío, esto funciona muy bien hasta que deja de hacerlo.

    Lo otro que comentas tendría que consultarlo con el informático de guardia 🙂 lo miro

    Saludos

  • whatgoesaround

    Vuelvo al ataque. Seré breve ( 😀😀).
    Lo que he apuntado sobre reflejar los últimos comentarios naturalmente es solo una sugerencia. Es tu blog y no quisiera que esto sonara a imposición u obligación. También es cierto que muchísimos blogs no lo tienen implementado. “Últimos comentarios” yo creo que le da más vidilla al blog porque fomenta la curiosidad, el chafardeo, obvio. “Vamos a ver qué ha comentado éste. Umm, a ver de qué estarán hablando aquí”. Habrá blogueros que pasen de este extremo, supongo.
    Sí probé después, pues se me encendió la bombilla, hacer clic en el dibujito que aparece a la izquierda del formulario con mail, nombre… Eso te lleva a la ficha de Gravatar, que es donde registramos nuestros avatares (iconos), mail, webs activas, etc. Al habilitarme ahí creí que tu blog ya me reconocería. Pero no, o algo hice mal.
    El tema de si existe el yo o no existe obviamente da para un debate colosal y eterno. Incluso igual dentro del budismo. Creo que el mismo Buda no se mojó al respecto. Ahora bien, si postulaba que no hay sujeto real en las experiencias (anatta) entonces parece claro hacia dónde se decantaba la balanza. Hacia el mismo lado se decanta mi balanza: que en verdad no hay yo, y no por mimetismo con el Buda. Habrá cientos de argumentos para sustentar que sí existe, y cientos en sentido opuesto. Así que creo que el yo existe y a la vez no existe. Un lío, como has dicho. Me parece muy obvio que existe como una configuración, algo semejante a lo que ocurre con una computadora. La gran mayoría de mortales estructuran su mente, conciencia, etc. en torno a una identidad individual, a una imagen de uno mismo. Ahora bien, yo creo que existe un yo y un Yo, siendo este segundo mucho más profundo y auténtico. Mi punto de vista y mi feeling es que somos una conciencia de base, todos los humanos, y que después ésta se estructura en lo que entendemos por personalidad, identidad o yo. Es en este sentido que te hablaba de trascendencia.
    Y precisamente ese yo con minúscula es el que entiendo y siento que es el personaje, una mera construcción (constructo). Y me parece que es algo anómalo, artificial, creado, ilusorio. Desde hace muchos años he tenido claro que este personaje era un montaje. No sé tu caso, me comentas que te ha resultado graciosa mi observación. Relacionado con este personaje tenemos obviamente ese diálogo o monólogo interior. Realmente, alguien lo dijo muy acertadamente, el pensamiento es esencialmente lenguaje interiorizado. Es esa vocecita en off constante, que puede acallarse en buena medida a base de observarla con desapego. El peligro de esto, convertirte en a la vez protagonista y observador de una película donde como dices te ves en tercera persona, es que acabes filtrando todo a través del pensamiento y que acabes en buena medida pensándote a ti mismo y pensando la vida. Me parece ir en la mala dirección. Que exista un observador que se percata de esta movida implica que nuestra identidad o conciencia es mucho más profunda, que puede escapar a eso. Y funcionar en base a ese personaje me parece un desdoblamiento interior, una alienación. De ahí que vea las disciplinas espirituales, la meditación y estas historias como métodos para llegar a la integración total de la mente. No somos el yo ni el ego ni el personaje ni el pensador ni los pensamientos. En verdad la inteligencia, conciencia o mente es invisible, inaprensible. Ahí sí que actúa ese vacío. No sé si me explico con algo de claridad.
    Ciao.

  • beauseant

    Me alegro mucho que hayas logrado arreglar el problema, si depende de mi estaríamos aún a oscuras… Estuve mirando las opciones y no encontraba nada, es una instalación de un dominio y no deja tocar muchas cosas y, bueno, que es todo un poco complicado, por eso lo dejo todo así 🙂
    No tengo muy claro lo que has hecho, pero si te funcionar, pues perfecto 🙂

    Eso que comentas de la existencia del yo, tal y como lo has planteado, una especie de configuración por defecto para todos los humanos que vamos modificando con las enseñanzas y lo que nos va ocurriendo, es muy de novela de ciencia ficción. Lleva a ese debate que sale de vez en cuando de si somos reales o no somos más que una simulación por ordenador en la que todo, incluida esta charla que estamos teniendo, ha sido decidida y preparada por un programa… Veo que has reflexionado sobre esto mucho más que yo, existen muchos conceptos en los que no he pensado y me vas a dejar pensando por una temporada en ellos. Mi recorrido por esos temas ha sido más accidentado, menos digamos metódico, me encuentro con cosas, como todas estas que has dicho, les doy vueltas una temporada y llego a una conclusión, que seguro no es gran cosa, pero que me sirve para seguir avanzando.

    Tuve una época en la que intentaba tenerlo todo muy claro, cada paso medido, y así no avanzaba en ninguna dirección. Y sí, quizás debería intentar no usar tanto eso de la tercera persona, ese desdoblamiento, al final corres el riesgo de convertirte en una fotocopia de otra cosa. ..

    Te dejo, sigo pensando 🙂

  • whatgoesaround

    Hola otra vez. No, si no he conseguido solucionar el problema. El formulario a rellenar me sigue saliendo, por ejemplo ahora mismo. Solo he dicho que pinché en el dibujito y eso te lleva a la ficha de Gravatar. Lo que parece es que tu blog incorpora ese Gravatar o avatar vacío, y por eso no me reconoce cada vez. Al final sí acabo en mi perfil, pero no arregló el problema. Quizá estoy dejando de hacer algo. Lo seguiré intentando.
    Ahora el que me has hecho gracia eres tú. Con lo de que es una cosa de ciencia ficción lo de la configuración por defecto en un yo individual. De entrada no lo veo tan descabellado. Que quede claro que con ese planteamiento no pretendo huir de la realidad y negar cómo son o funcionan los seres humanos. No es eso exactamente. Mira, otra gente lo tendrá clarísimo, pero mi problema es que no sé qué somos en el fondo. Sí, soy un bicho raro. A ver, todo esto no es nada fácil de explicar en cuatro líneas. Digamos, para enfocarlo de otro modo, que creo que hay muchos niveles de conciencia dentro del ser humano, y otros más raros, que no aparecen tanto, serían más profundos. Podríamos pensar por ejemplo en el genio, la intuición, cosas así…
    Lo de la simulación y que llegue a dudar de nuestra propia existencia… no es eso exactamente, ni llevo las cosas tan lejos. Es cierto que hay gente, incluso filósofos y científicos, que sostienen que la realidad es una matrix o matriz y que todo es como una enorme realidad virtual. Podría ser, en cierto sentido, pero no me agarro a todo eso para nada.
    Más bien es dudar de que haya algo nuclear, tangible, real, concreto, que podamos denominar yo. Lo hay a nivel funcional, pues los humanos somos unidades funcionales de cuerpo y mente. Pero repito que se asemeja a una configuración, que es contingente, finita, limitada, etc. La condición humana normal y corriente. Pero me pregunto si hay algo más, repito. Más profundo, y no hablo de Dios ni del alma. Prefiero dejar de lado los términos religiosos.
    Bueno, repito que hablar de esto es complejo… No en vano no dejan de ser las grandes preguntas que siempre se ha hecho la humanidad. Y no en vano ha habido tradiciones místicas, espirituales, religiones, filosofías, etc., que han intentado dar con respuestas. Por algo será. Por lo menos no soy el único “pirado” 😀 que se hace preguntas.

  • whatgoesaround

    Solo una cosita más, para que pienses un poquito más…
    Siempre se ha dicho y se ha sostenido, y aparece en muchos relatos, obras literarias, historias, testimonios, etc., que los niños/as no tienen arraigado ni claro (configurado) un sentido del yo o de la identidad individual (incluso dicen algunos de identificarse con el cuerpo físico). Son la sociedad, la educación, la familia, la escuela, etc., quienes van inculcando y moldeando esa identidad acorde a lo establecido. También se dice a menudo que los niños viven en un mundo más mágico, que conectan incluso con otros planos de la realidad, o ven seres invisibles, o explican experiencias que los adultos sencillamente rechazan, niegan o no creen. No me lo invento, hay muchos testimonios en ese sentido. Parece que funcionan y se perciben a sí mismos de forma distinta, hasta que no les hacen entrar en el redil. ¿No crees? Por lo menos yo 😀 me niego a creer que obedezca tan solo a su corta edad, a su falta de experiencias, de desarrollo a todos los niveles, a su inocencia y explicaciones de ese tipo (como si esa “configuración” diferente y especial fuera una especie de fallo o carencia).
    Hala, dicho queda.

  • Beauséant

    Sí, pienso algo parecido, por eso escribí eso de que pasamos mucho tiempo aprendiendo cosas y otro tanto intentando derribarlas. Lo que has dicho, entramos en el redil, aceptamos la configuración del mundo que nos dan los adultos que nos rodean, si lo piensas bien, ni tan siquiera te preguntan si es aceptable o no para ti. Y ay de quién no lo acepte, se convierte en la oveja negra, de alguna forma hasta esperan verle fracasar para poder señalar con dedos acusadores.

    Y, pues eso, la otra mitad de tu vida te empiezas a preguntar si todo eso en lo que crees tiene algún sentido, si te lleva a algún lado.. de alguna forma volvemos a intentar ser niños… No se puede del todo, claro, conforme te has caído, te has y te han hecho daño, ya no puedes volver a creer. La primera vez que te quemas con el fuego sabes que no debes acercarte… pero sí creo que cada día podemos intentar recuperar un poco de todo lo bueno que tenía aquello….

  • whatgoesaround

    Hola. Acabo de descubrir ahora tu respuesta. Pues me alegro de que coincidamos en las líneas básicas, sobre cómo los niños/as ya empiezan a recibir las influencias, los patrones de la sociedad a todos los niveles (“educación”) y a entrar en el redil. Me parece difícil negar esto. Pues qué fuerte. No sé si leerás este comentario, espero que sí. Acabo de descubrir un vídeo donde se explica a la perfección todo esto que estamos hablando y lo del “personaje”, el desdoblamiento o alienación de las que te hablé. Te prometo, de verdad, te juro que he descubierto este vídeo hace unos 20 minutos. O sea, no te dije todo eso influenciado por ejemplo por ese vídeo, sino porque todo lo que he dicho hace muchos años que lo tengo muy claro. He de decir que la figura de Antonio Blay, de quien parten estas enseñanzas, ya la conocía. Pero repito que no el vídeo ni al señor que habla.
    Te lo digo en serio y te lo recomiendo de todas todas; deberías escuchar lo que en él se dice. No te inserto el vídeo aquí por no pasarme de pesado o de comecocos. Y además nada tiene que ver con el relato “Palimpsesto”. Pero de verdad te lo digo, escucha ni que sean 5 minutos y verás si te engancha la argumentación o no. Repito que explica a la perfección lo hablado sobre los niños, cómo los moldean psicológicamente, etc. Su título…
    “ADCA – El Personaje en la línea de trabajo interior de Antonio Blay”.
    ¿Te acuerdas de que te hablé de un Yo y un yo? Sí, podría resultar tremendamente confuso. Pero utilizando precisamente la terminología de Blay quizá queda un poco más claro: El yo con minúsculas sería el Yo-idea, la imagen que nos formamos de nosotros mismos, y que en buena medida queda distorsionada de la realidad. Precisamente tendemos a idealizarnos, a ocultar o no mirar lo incómodo o lo oscuro (como me decías). Es una imagen mental, el ego, el personaje protagonista de nuestra película. Y entonces tenemos al personaje y al yo real que lo observa. Es bastante de locos. Obviamente no es tener una mente integrada. En cambio el Yo con mayúsculas es el Yo-experiencia, el Yo real, la totalidad de nuestro ser, personalidad, identidad, etc. Es el Yo total u holístico, y desde mi punto de vista trasciende lo meramente personal, por marciano que suene. El Yo total, como dice el señor en el vídeo, es fundamentalmente inteligencia, amor y energía. Sería quien observa todo el tiempo, también nuestras películas mentales. No sé si esta aclaración sirve.
    Sigue el dichoso formulario. Me tiene frito. Esto en tu blog claramente debería solucionarse (deberías preguntarle a otros usuarios si les pasa, aunque veo por comentarios que siempre dicen “olvidé logearme” y cosas parecidas, y entonces salen como anónimos. Consulta con ese informático cuando puedas).

  • Beauséant

    Miraré el vídeo, suena interesante, incluso para alguien tan escéptico como yo con ciertas cosas que hablan de esos temas. Mi escepticismo no viene tanto de no creer en esas cosas como de ciertos intentos que suelen tener esos autores por “ir demasiado lejos”. Algunos conceptos, ciertas ideas, tienen su sentido y funcionan bien, pero cuando se llevan más lejos de lo que en realidad son empiezo a pensar que están intentando venderme algo que no es del todo cierto…

    Pero buscaré l vídeo, sí, siempre es bueno aprender…

    En el fondo nunca somos originales, o no del todo, ¿verdad?, casi cualquier cosa que digamos ya ha sido dicho antes, con otras palabras, en otro contexto. Al final es eso, añadir un granito de arena sobre una montaña de pensamiento.. Así que es normal que ciertos conceptos o ideas se repitan… No creo que haya un texto cien por cien original en todo este sitio, pero seguro que hay enfoques o ideas nuevas… Con eso me vale

    Saludos

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *