la vida de un insecto
Todas las tardes, con la puesta del sol, el pequeño insecto de la foto sube a lo alto de esa espiga para pasarse las horas que restan hasta el anochecer cobijado en ese frágil caparazón. Allí, acunado por el viento, sueña que salta los muros inmensos de su miedos y trepa muslo arriba por las piernas de sus actrices de cine favoritas.
Sus diminutas antenas tiemblan de puro gusto con sólo pensarlo. Cuerpos perfectos, trampolines erectos lubricados con el sudor que impregna las largas noches de Verano. Mi amigo es un insecto pequeño pero tiene grandes sueños.
Sé que no me creeréis, que ese insecto que yo vi no sería uno, sino varios que se turnaban para estar ahí arriba y que lo hacían por algo más prosaico que tener unas buenas vistas.
Pero es cierto, era siempre el mismo insecto. Lo sé porque al segundo día nos saludamos y comenzó a contarme su vida llena de tribulaciones. La vida de un insecto, una vida dura con toda esa locura de aparearse, tener larvas e intentar buscar algo de dignidad en los pequeños resquicios que te van dejando.
Una vida pequeña y miserable, como todas las vidas. Una vida llena de sueños. Una vida en la que cabrían dos vidas. Así de pequeña era.
Pronto sabrás de mi, me dijo al marchar, algún día cumpliré todos mis sueños.
15 Comments
María
Mmmm pero qué preciosidad!!!!
De foto…
¡Qué foto! es una caricia.
De letras, de historia. Todo!
Un pequeño enorme, los que más me gustan.
Gracias, un besito… otro para él, si lo vuelves a ver y para la espiga pájaro ; )
kadannek
Los miserables me intrigan, por eso me intriga, en general, toda la humanidad jajaja. Conozco a un par de insectos, con sueños que no se empeñan en cumplir, sólo se divierten imaginando lo que sería. Es como si se anestesiaran brevemente para sobrevivir cada día. La dignidad es una cosa seria y que no todos saben llevar como es debido. Cosa interesante.
Buen relato, reflexivo.
Saludos!
Beauseant
Gracias, María, las vidas pequeñitas de insectos a veces guardan tesoros en su interior, es cuestión de saber escuchar y de tener algo de paciencia… la foto, la foto fue casi una casualidad (ahora que no nos lee nadie te lo confieso)
A veces todos somo un poco insectos, ¿no, kadannek?.. pasamos más tiempo imaginando cosas que intentando ponerlas en marcha… La dignidad, como dices, es algo que no deberíamos tomar a la ligera porque una vez perdida ya no queda nada.
Toro Salvaje
Yo te creo.
Mi mejor amigo es una rata.
Saludos.
Maria Perlada
Hay insectos que chupan hasta la sangre envenenándola.
Besos.
MUCHA
Los insectos los odio los persigo si los veo
tus letras muy bellas y con esto cierro el cielo
Beauséant
Las ratas son seres muy empáticos y cariñosos, Toro Salvaje, me alegra que hayas sabido ver más allá de sus enfermedades y hocicos llenos de pústulas 🙂
Insectos, Maria Perlada y personas. Esas son las peores…
Te ha quedado un haiku muy bonito, Mucha.. ¿la verdad? tampoco soy yo mucho de insectos, de lejos y con cámara me atraen, pero de cerca…
MUCHA
gracias compañero
Vanessa
Todos somos un poco “insectos”, intentando cumplir los sueños. Tal vez nos ganen algún día, los humanos somos más lentos. Besoss
María del Rosario
¡Qué ternura la vida de un insecto valorada en tus letras como debe ser!, aunque sabemos que muchos nos sentimos así alguna vez, me encanto querido amigo tu sensibilidad a flor de piel.
Abrazo
Beauseant
A usted, mucha, a usted 🙂
Beauseant
Los insectos tienen esa sencillez de plantemientos que les hace invencibles, Vanessa, cuando ya no queden humanos, ellos seguirán dando vueltas por ahí como si nada. Es más, ni se darán cuenta de que no estamos.
La historia empezaba así, María del Rosario, con una persona pequeña que era casi, casi insecto y al final fue, pues eso, un insecto… Gracias
umma1
Ayyy Beauséant.
Por fin pude entrar a tu blog.
Tenía ansias de quebrar la barrera técnica que me lo impedía, porque sabía lo que encontraría.
Celebro que haya podido acceder al paraíso, porque eso es esta página. Qué deleite seguir el camino de tus ideas, la belleza y sutileza con que te enuncias.
No sé si nos conocíamos de antes, pero siento que sí, que ya he gozado de la lectura que nos proporcionas. Sos un deleite y una inspiración.
umma1
Ayyy Beauséant.
Por fin pude entrar a tu blog.
Tenía ansias de quebrar la barrera técnica que me lo impedía, porque sabía lo que encontraría.
Celebro que haya podido acceder al paraíso, porque eso es esta página. Qué deleite seguir el camino de tus ideas, la belleza y sutileza con que te enuncias.
No sé si nos conocíamos de antes, pero siento que sí, que ya he gozado de la lectura que nos proporcionas. Sos un deleite y una inspiración.
Beauseant
Lo siento, umma1, no sabía que daba problemas, pero no me extraña nada, es un poco temperamental 🙂 Muchas gracias por tus palabras, aunque digamos que no nos importa que nos lean, bueno, claro que nos importa 😉 Un abrazo